Los científicos han descubierto lo que creen que es el par de zapatos más antiguo de Europa en una cueva de murciélagos en España. Según un estudio publicado en la revista Avance de la cienciaSe cree que el par de sandalias tejidas con hierba tiene alrededor de 6.000 años. Estas piezas formaban parte de un grupo de piezas antiguas encontradas en una cueva de murciélagos en Andalucía, que fue excavada por mineros en el siglo XIX. Investigadores de la Universidad Autónoma de Barcelona y la Universidad de Alcalá en España analizaron los objetos, que también incluían cestas y juegos de herramientas.
Los objetos «son la colección más antigua y mejor conservada de materiales de fibra vegetal conocida hasta la fecha en el sur de Europa», dijo la coautora del estudio María Herrero Uttal. Estancia. «La diversidad tecnológica y el procesamiento de materias primas documentadas ponen de relieve la habilidad de las sociedades prehistóricas», añadió.
Según el estudio, los zapatos antiguos se descubrieron por primera vez en 1857, cuando los mineros saquearon una cueva en España. Sin embargo, cuando los artefactos se fecharon por primera vez en la década de 1970, se determinó que eran unos 1.000 años más jóvenes de lo que encontró este último análisis.
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Ahora, los rápidos avances en las técnicas de datación han hecho que estos elementos sean más de 2.000 años más antiguos de lo que se pensaba anteriormente. La baja humedad y los vientos fríos en la cueva mantuvieron los artefactos inusualmente bien conservados, dijeron los investigadores. Revelaron que algunos de los artefactos de la colección datan de hace 9.000 años.
Las sandalias analizadas por los investigadores en España estaban hechas de hierba además de otros materiales, como cuero, cal y ramio, un tipo de fibra natural. Datan del Neolítico, lo que los hace más antiguos que los zapatos de cuero de 5.500 años de antigüedad que se descubrieron en una cueva de Armenia en 2008.
Los investigadores también estudiaron muchas de las cestas y otros artefactos de madera de la colección. Estos objetos «abren perspectivas innovadoras sobre la complejidad de las sociedades del Holoceno temprano y medio en Europa», dijeron. Los investigadores observaron que tanto las cestas como las sandalias indican que los fabricantes de estas cestas tenían un amplio conocimiento de los recursos vegetales en el entorno local, así como un alto nivel de experiencia.